martes, 2 de noviembre de 2010

De lo políticamente correcto...

a lo demencial (de demente, loco). Una especie de pasmo inaudito experimenté cuando leí este cuento que, a mi pesar, es mucho más que un cuento. Es una terrorífica realidad que nos obliga a ser uniformes, cuadriculados y de pensamiento único, bien encerraditos en la tribu de lo correcto y lo que está ¿bien? porque afuera hace un frío que pela. Os dejo el recadito y ya me diréis si exagero o no:
"Para ilustrar los peligros del espíritu lógico, en Europa se cuenta que un hombre, al encontrarse con otro, le preguntó:
-¿Tienes un acuario en tu casa?
-Sí.
-¿Con peces?
-Claro.
-¿Peces de colores?
-Sí.
-¿Con arena, piedras, algas?
-Pues claro.
-¿Y te gusta mirar a los peces?
-Mucho.
-Entonces, ¿te gusta la naturaleza?
-Sí.
-¿Te gustan los animales?
-Sí, sí.
-¿Te gustan las flores, los árboles, los ríos?
-Todo eso.
¿Así que te gusta la vida?
-Sí.
- ¿Te gusta el amor?¿Te gustan las mujeres?
-Sí, sí, me gustan las mujeres.
-Muy bien.
Los dos hombres se separaron. Un poco más lejos de allí, el primer hombre, el que hacía las preguntas, se encontró a otro amigo y le preguntó:
-¿Tienes un acuario en tu casa?
-No.
-Entonces, ¿eres pederasta?"
Jean-C. Carrière
Sin comentarios....